” Hacer memoria es reconocer y reforzar las identidades de las mujeres y promover acciones de resiliencia”
Gracias al proyecto “Mujeres Campesinas Narran su Territorio” Liderado por la Asociación de Organizaciones Campesinas y Populares de Colombia – El Común con el apoyo del Ministerio de Cultura a través del Programa de Concertación cultural se realizó el primer taller nombrado: memoria ancestral, con el objetivo de despertar y recordar las historias de las mujeres rurales del territorio y dando a conocer las memorias de los primeros movimientos de los habitantes de la región en especial las mujeres campesinas quienes buscan defender sus derechos frente a la situación actual que se vive en el territorio.
Mujeres de la asociación ASOMUC del municipio de Confines participaron de este taller, el desarrollo de este se dio en seis momentos, se inició con un reconocimiento de egos y virtudes, cada mujer debía identificarlos e identifícalas con una calificación del 1 al 10. Hacer una presentación y compartir “quién eres” con las demás integrantes del grupo fue muy importante para el segundo momento, saber quiénes son permitía y facilitaba el encuentro colectivo. Para el tercer momento se evidenció la alegría, la paciencia, el interés, la creatividad y el dinamismo del grupo, ya que, a través del tejido con unos gramos de lana y cuatro pitillos de plástico como base para elaborar un pequeño canasto, recordaban los oficios e historias de sus antepasados la memoria ancestral broto en esta ocasión, los resultados fueron satisfactorios.
“El cuerpo mi primer territorio” a partir de una silueta dibujada del cuerpo, las mujeres señalaron en que parte sentían tristeza, alegría, rabia, alguna enfermedad o dolor. Fue un momento de sonrisas al ver que la silueta de su cuerpo no quedaba perfecta, el reencuentro consigo mismas fue muy notorio.
Dejando huella, la planta de unos de sus pies fue pintado y luego puesto sobre una hoja blanca, en esta huella escribieron que significa para ellas, que era lo que observaban de ella. Firmeza, seguridad, fuerza y autenticidad fueron una de las palabras.
El tiempo se hace corto, para finalizar el taller cada mujer escribió su línea de tiempo, mencionando los momentos más felices y tristes que ha vivido hasta el momento. Recordar la memoria histórica se constituye en el ejercicio individual y colectivo que nos permite como sociedad no olvidar lo sucedido, y a nivel particular porque somos parte de la historia, es un medio para prestar memorias para la construcción de otros relatos, y no seguir leyendo la historia oficial como el único gran relato de la misma.
Que bueno hacer historia de la cotidianidad y vida productiva de nuestras organizaciones de mujeres campesinas excelente trabajo técnico….felicitaciones.equipo El Común..